11 Abr Salud mental, cuidamos lo que no se ve
Hablamos de salud mental, hablamos de nuestro bienestar emocional, social y psicológico. La salud mental es una cuestión compleja y amplia, que afecta a todas las etapas de la vida y que nos determina a la hora de relacionarnos, de tomar decisiones y de afrontar situaciones. Según sea nuestra salud mental así nos afectará en cómo pensamos, cómo nos sentimos y cómo actuamos ante la vida en general.
Parece fácil mantener una buena salud a nivel mental y emocional pero, ¿lo es realmente?
Hace apenas unas semanas un estudio liderado por la Confederación Salud Mental España y la Fundación Mutua Madrileña hacía saltar todas las alarmas con unas cifras preocupantes:
- 4 de cada 10 españoles aseguran no gozar de una buena salud mental
- Casi el 75% de la población asegura que su salud mental ha empeorado en los últimos años.
- El 14,5% de los españoles admite haber tenido ideas suicidas o haber intentado quitarse la vida.
Este estudio, realizado en base a una encuesta a 2.000 personas y a conversaciones con enfermos, familiares y profesionales sanitarios, nos acerca a una realidad que los profesionales de la psicología conocemos ya desde hace mucho tiempo. En España hay un problema de salud mental generalizado y es posible que no estemos prestando la suficiente atención a esta situación, algo que a largo plazo supone un problema estructural como sociedad.
Otro dato que nos pone en alerta es que muchas personas confiesan haber vivido situaciones de depresión, ansiedad o pánico en algún momento de su vida. Puede parecernos normal, pero no lo es, sobre todo porque muchas de las personas que sufren estos episodios no piden ayuda, por lo que no tienen un diagnóstico preciso y no reciben tratamiento adecuado.
Además, según datos del propio estudio el perfil mayoritario de persona con mala salud mental es mujer, joven, de nivel socioeconómico bajo y mayoritariamente soltera. Una referencia que convierte a este tipo de perfiles en personas vulnerables desde el punto de vista psicológico.
¿Por qué enferma nuestra mente?
No existe, por lo general, una única razón que haga que nuestra salud mental empeore, llegando a desarrollar un trastorno o enfermedad mental.
Algunos de los factores que nos afectan son:
- Factores biológicos, como la genética o la química del cerebro.
- Experiencias vitales, situaciones traumáticas o difíciles.
- Factores psicológicos, como son los aspectos afectivos o las relaciones.
- Estilo de vida, consumo de sustancias, actividad física, estrés, etc.
Los trastornos mentales pueden gestarse durante un largo tiempo o bien surgir de manera más o menos repentina, fruto de una situación desencadenante. Sea cual sea el motivo, o la suma de los motivos, es fundamental identificar la necesidad de acudir a un psicólogo que nos pueda atender y tratar.
Bienestar social
La salud mental es más que un estado de ánimo, es un derecho que todas las personas tenemos y es una necesidad para desarrollar una vida plena y feliz. Además, como sociedad es fundamental contar con personas que gocen de salud mental, tanto por el ahorro que supone a nivel de gasto sanitario como por todo lo positivo que estas personas pueden aportar.
La salud mental de la población es uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos como sociedad en España. Las enfermedades mentales son una de las grandes preocupaciones a nivel de salud en nuestro país y somos conscientes de que, tras una etapa marcada por una pandemia mundial, es el momento de centrar nuestra atención en el cuidado mental de las personas.
Señales de que nuestra salud mental está resentida
Es bueno saber identificar el estado de nuestra salud mental, conocernos a nosotros mismos y saber si estamos en un momento delicado que requiera ayuda de un profesional de la psicología.
Compartimos algunas señales que pueden ponernos en alerta:
- Dificultades para conciliar o mantener el sueño.
- Pensamientos recurrentes y obsesivos.
- Sensación de desánimo y problemas para disfrutar de actividades que antes nos gustaban.
- Estrés, irritabilidad, agresividad o cambios de humor.
- Falta de control de las emociones.
- Problemas físicos como consecuencia de somatización de problemas psicológicos.
¿Te sientes así? No dudes en consultar con un profesional de la psicología. Tu salud es lo más importante, por eso es fundamental ponerla en manos de personas expertas que analicen tu situación, te ofrezcan un diagnóstico concreto y desarrollen una terapia individualizada y controlada.